La Medicina Antroposófica

Como introducción a la medicina antroposófica se presenta a continuación un texto escrito por el presidente de la Asociación de médicos para la medicina antroposófica1 en España que fue publicado en la revista Natura medicatrix Vol. 19 año 2001 en el que se recogen los principios propuestos por esta medicina.

“La medicina antroposófica, que forma parte de la denominada Medicina complementaria, se basa en la medicina académica y es sólo practicada por médicos titulados. Además, amplia los conocimientos de la medicina académica con la investigación resultante de otros ámbitos como el de la vida, el del alma y el del espíritu del ser humano. Los métodos que emplea para esta investigación son los de la ciencia espiritual antroposófica de Rudolf Steiner. En su desarrollo se pueden destacar sus aportaciones en el terreno médico terapéutico en tres direcciones básicamente.

La medicina antroposófica se apoya en la concepción del hombre y del mundo de la Ciencia espiritual o Antroposofía. Esta concepción presenta a la entidad humana constituida por diferentes planos o dimensiones: corporal, vital, anímica y espiritual.
El conocimiento científico de las dinámicas, los procesos y las leyes de cada una de estas dimensiones, así como de la relación entre ellas, aporta una ampliación antropológica que llevada al terreno de la medicina da sentido y explicación tanto al estado de salud como al de la enfermedad.
De esta manera la medicina antroposófica complementa a la medicina académica en su concepción meramente material y mecánica de la salud y la enfermedad, la enfermedad es un defecto o daño y la terapia consiste en su reparación y es por lo tanto un problema técnico. Amplía la medicina biológica y psicosomática que basan sus terapias en la regulación de las funciones alteradas o en orientaciones y consejos con los que el paciente pueda resolver sus problemas.

Gracias a los conocimientos de la medicina antroposófica se conoce concretamente la relación de los componentes físicos-biológicos con los anímicos-espirituales, resultando de ello una ampliación donde el cuerpo y la psique son como compañeros del yo o individualidad del enfermo. Su concepción de la enfermedad es procesual e incluye junto a los fenómenos materiales, funcionales y psicosociales la individualidad del enfermo. La enfermedad es por tanto un suceso que tiene que ser visto en relación con la biografía del enfermo, con sus circunstancias vitales y con sus posibilidades y condiciones de evolución y desarrollo.
La terapia será siempre individual tanto en el tratamiento como en el acompañamiento de las situaciones agudas o crónicas.
En definitiva la medicina antroposófica aporta una visión científica de las fuerzas curativas del organismo humano en su estado de equilibrio o de salud y en su estado de enfermedad. El significado de esta aportación es amplio, integral y dinámico.

Una segunda aportación de la medicina antroposófica se enmarca en la relación médico paciente. Es bien conocida la realidad de la deshumanización en la medicina moderna basada en la técnica, el médico hoy día está muy bien formado y capacitado profesionalmente, pero lo está solo en los aspectos técnicos y no en los humanos, por lo tanto surge la pregunta ¿Cómo el médico adquiere igualmente competencia humana y no sólo competencia técnica? Sólo de esta manera el médico puede contribuir a humanizar su relación con el paciente.

Para la medicina antroposófica en el punto central están l paciente y la terapia individual. Por esta razón sólo en casos excepcionales se aplican esquemas terapéuticos. Se incluyen en el diagnóstico y en la terapia la edad, la constitución, la situación biográfica y el estado anímico-espiritual del paciente. Se están elaborando procedimientos de documentación que se basan en casos particulares representativos y en estudios de los resultados (out-come-studies). De acuerdo con la metodología mencionada, estudios doble ciego randomizados se utilizan sólo en circunstancias especiales, en general se rechazan por razones éticas, salvo en casos en los cuales no se escatime al paciente un tratamiento eficaz. Al examinar medicamentos y conceptos terapéuticos en el marco de la medicina antroposófica se debe tomar en cuenta que la relación médico paciente y la elección consciente del medicamento y de la terapia son fundamentales en la terapia de orientación antroposófica.

El médico de orientación antroposófica se basa en la ética general de la deontología médica y añade a ello la obra filosófica principal de Rudolf Steiner que es "La filosofía de la libertad" donde se desarrollan las bases de "una concepción moderna del mundo", concepción que tiene el individualismo ético como centro y con una visión del hombre que reconoce su individualidad espiritual como eterna e indestructible aunque viva en un cuerpo enfermo o impedido.

Con ello se complementa la visión materialista inmanente a la medicina que se basa en la ciencia, al reconocer el ser espiritual del hombre. Esta concepción ética del hombre incluye la idea de la reencarnación y la confianza en la capacidad ilimitada de desarrollo del ser humano. En base a este punto de partida evolutivo se da una importancia central a aspectos preventivos de la medicina como la práctica de la meditación, la autoeducación y el autodesarrollo. En muchos países se han constituido asociaciones de pacientes para promover esta idea de la prevención en el ámbito de la salud dando a conocer medidas que fortalecen al ser humano a nivel espiritual, anímico y corporal.

La tercera aportación general de la medicina antroposófica radica en su espectro terapéutico, que es amplio, variado y que recurre en parte a la tradición pero está lleno también de elementos innovadores.

La práctica de la medicina antroposófica abarca desde la atención médica general y de medicina de familia hasta todas las demás especialidades médicas: Cirugía, medicina interna, pediatría, oncología, ginecología y obstetricia, neurología, psiquiatría, dermatología, ORL, oftalmología, traumatología, etc.

Los medicamentos son elaborados según procedimientos especiales y por ejemplo en Alemania son aprobados y registrados por una comisión especial propia(Comisión C en el Instituto federal del medicamento y productos médicos) que ha elaborado monografías sobre los mismos que han sido publicadas.

El hallazgo de nuevos medicamentos, su preparación y su aplicación tienen como base la visión antroposófica del hombre y de la naturaleza. Especialmente conocidos son los preparados de Viscum album, para el tratamiento del cáncer, desarrollados desde esta perspectiva (Abnobaa viscum, Helixor, Iscador, Iscucin y Visorel).

TERAPIAS COMPLEMENTARIAS

Modelado terapéutico, pintura terapéutica, arte de la palabra terapéutica, músicoterapia y canto, así como la euritmia curativa como una terapia del movimiento nueva incorporada a la medicina.

Masaje rítmico, fricciones rítmicas así como una variada y muy efectiva gama de aplicaciones externas en el cuidado a los enfermos. También una gimnasia terapéutica especial desarrollada a partir de la gimnasia Bothmer existente desde 1920.

Trabajo biográfico y logoterapia de apoyo forman parte de la ayuda médica para el autodesarrollo así como el ejercitamiento meditativo.

Programas reconocidos internacionalmente para drogodependientes.

Estrecha colaboración con pedagogos (promoción de la actividad médico-escolar) y una práctica propia en el campo de la pedagogía curativa y de socioterapia en más de 350 centros (incluidos los del movimiento Camphill) en 26 países de Europa y otros 12 países del resto del mundo.”

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